COSTUMBRES
Y MITOS PARA RECORDAR
Por: Leopoldo Vásquez Núñez
Existen algunos usos, costumbres y mitos
tradicionales que han sido muy comunes en la población rural de la sierra
cajamarquina y otros lugares, que con la modernidad se van perdiendo y que es
necesario por lo menos tener una idea mediante los relatos que pienso publicar
a partir de la fecha.
EL
CARDÓN (Dipsacus fullonum)
Es
una hierba robusta de más o menos 1 metro de alto, con la raíz gruesa y blanca,
como un nabo, su tallo erguido provisto de aguijones cortos y punzantes, tiene pocas
ramas largas paralelas al tallo principal, las hojas basales son más grandes
que las superiores, tienen forma lanceolada con los bordes dentados, son opuestas,
entresoldadas, formando un embudo cerrado, que se llenan de agua cuando llueve,
tanto el tallo como las ramas terminan en una inflorescencia en forma de una
cabezuela ovoide, de 5 a 10 cm de largo, en donde están las flores lilas o
blancas como tubitos, que sobresalen de las brácteas protectoras convertidas en
espinas largas, ganchudas y punzantes, de tal manera que al madurar forman como
una esponja dura sobre los tallos delgados, semejando un hisopo espinoso.
Foto: Leopoldo Vásquez Núñez |
Su
uso es ancestral, probablemente desde que el hombre comenzó a vestirse con tela
confeccionada de lana de oveja, se remonta hace miles de años en Europa, porque
con sus cabezas espinosas se confeccionaba una paleta o manojo de ellas,
llamada percha, que se utilizaba para suavizar la superficie de la tela sacándole
pelusa con las espinas y así evitar que la tela dura raspe la piel y la escalde,
con este fin se ha usado en la sierra del Perú hasta mediados del siglo pasado,
cuando la vestimenta de hombres y mujeres eran confeccionadas artesanalmente de
lana, al proceso se le llamaba cardado, debido al uso del cardón, esa
vestimenta, tanto las faldas o polleras, llamadas fondo, como la bayeta o
pañolón que usaban las mujeres, así como también los pantalones y el poncho,
que vestían los hombres han dejado de utilizarse o hacerse de lana, habiendo
sido sustituidas por telas industriales, por lo que el cardón ha dejado de
usarse con este fin y más bien tiene uso medicinal, la raíz y las hojas
protegen y estimulan la función hepática.